Hay veces que uno se dispone a hacer una ruta con gente y pasan cosas. A todos nos ha pasado pero, en esta ocasión, le pusimos solución.
Al final el grupo se reencuentra y, campeando que no es poco, nos metemos por sendas y caminos maravillosos de camino al Refugio del Naranjo desde donde se divisa buena parte de la sierra de Madrid y alguna que otra sorpresa.
Mientras tantos, buena gente, buen rollo, charlas de todo tipo, un poquito de dron en zona legal del embalse de la Aceña, motos motos y motos y, lo dicho, no siempre salir en moto es carretera en manta, también hay bosque.
Espero que os guste.
Al final el grupo se reencuentra y, campeando que no es poco, nos metemos por sendas y caminos maravillosos de camino al Refugio del Naranjo desde donde se divisa buena parte de la sierra de Madrid y alguna que otra sorpresa.
Mientras tantos, buena gente, buen rollo, charlas de todo tipo, un poquito de dron en zona legal del embalse de la Aceña, motos motos y motos y, lo dicho, no siempre salir en moto es carretera en manta, también hay bosque.
Espero que os guste.